Cuando en 1889 Emilia Pardo Bazán publica «Morriña», la autora gozaba ya de acreditada fama y popularidad tanto por su ficciones narrativas como por su labor de crítica literaria que le había llevado a divulgar entre el público español la novela europea del momento. «Morriña» se adscribe a una estética realista que doña Emilia cultiva de forma sostenida en toda su trayectoria novelística. El sencillo argumento de la novela, una historia casi doméstica que bascula entre tres personajes, doña Aurora, su hijo Rogelio y Esclavitud, la nueva doncella de la casa, no está sin embargo exento de cierta complejidad en el proceso interior y de conducta que sufren sus personajes, provocado por las relaciones que se establecen entre ellos. Desentrañar su significado último será tarea de nuestra competencia lectora.
Mi tercera lectura de esta gran escritora. Una novela breve pero muy intensa, que evoca muchos sentimientos. Esta vez el escenario no es la Galicia rural sino Madrid, y desde allí se habla de la morriña, de la añoranza por la tierra. Así vemos a Rogelio, quien queda admirado ante la expectativa de conocer la tierra de su madre, aunque se criara en Madrid. Doña Aurora le transmite el amor por su tierra. Luego está el personaje de Esclavitud, un personaje fascinante, el que más me ha conmovido hasta ahora de todos los creados por Pardo Bazán. Algo que también me ha encantado, quizás porque se asemeja en ese aspecto a Galdós, es que retoma personajes de otros libros, me gustó ver de nuevo a Gabriel Pardo. Esta novela no es tan naturalista como Los pazos de Ulloa y La madre naturaleza, pero incorpora a la narración ironía con la caracterización de varios personajes pintorescos que pasan por la casa de Doña Aurora. El desenlace es impactante, desolador.
Un libro muy recomendable, como todo lo que he leído de esta escritora hasta ahora.
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"También está familiarizada con las caras de los profesores,y estudia su continente y su modo de responder al saludo de sus discípulos, sacando de los signos exteriores importantes consecuencias psicológicas relacionadas con el problema de los exámenes."
"Encierra el tono de la voz humana misteriosos avisos, que en situaciones dadas revelan todo lo que oculta el alma antes que las palabras lo digan."
"La armonía y la moderación son siempre hermosas, y Rogelio, sin definir esta belleza que le rodeaba, la sentía y se envolvía en ella como el pájaro en el plumón de su nido. Y mientras en la chimenea chisporroteaba la leña ardiendo, y de la cocina venía amortiguado el repique del almirez, y discutían los viejos, y la madre activaba las agujas de su medida, el muchacho, sumido en vaga contenplación, fantaseaba como sería quel país bonito, aquella Galicia verde, llena de agua, de flores y de muchachas mimosas."
2 comentarios:
Ostras! Es verdad! No me había fijado que el prota es Gabriel Pardo :D Pero no recuerdo si comenta algo de las hermanas...
Bicos ;)
Sí, el mismo Gabriel Pardo de La madre naturaleza. Luego participa en un capítulo Rita, hermana de Nucha.
Ah me encanta tu blog.
Un abrazo
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