CANCIÓN DE NAVIDAD de Charles Dickens

Canción de Navidad narra la inquietante noche que en la víspera de esta festividad pasa Ebenezer Scrooge -anciano miserable y tacaño, que es una de las más acabadas representaciones del avaro de la historia de la literatura y otro de los inolvidables personajes de la amplia galería dickensiana- de resultas de la visita del espectro de su antiguo socio, Jacob Marley.

Canción de Navidad es de esos libros que se pueden releer y no defraudan. En cada nueva lectura se descubre algo nuevo. Dickens es un maestro recreando escenarios, consigue una escenificación espeluznante en la visita de los fantasmas a Scrooge, y en sus posteriores viajes.Un cuento inmortal para leerlo en estas fechas y que nos haga reflexionar.
Este cuento se ha hecho universal gracias a las numerosas adaptaciones que se han hecho de él. A mí me gusta en particular la película de Disney.

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"Algunas personas se reían del cambio que había experimentado, pero él las dejaba reír y hacía poco caso, pues era lo bastante sabio para saber que en este mundo nunca había ocurrido nada bueno sin que al principio algunas personas se rieran; y sabiendo que en cualquier caso esas personas están ciegas, pensaba que más valía que se les arrugaran los ojos de risa, que por culpa de una enfermedad de ormas menos atractivas."

"El espíritu se situaba junto a las camas de los enfermos, y éstos se alegraban; al lado de quienes vivían en tierras lejanas, y se sentían como en su hogar; junto a los que luchaban en la guerra, y se consolaban forjando grandes esperanzas; entre los pobres, y se creían ricos. En orfanatos, hospitales y cárceles, en todos los refugios de la miseria, en todos los lugares donde el hombre, envanecido por su efímera autoridad, no había atrancado la puerta, dejando fuera al espíritu de la Navidad, éste daba su bendición y enseñaba sus preceptos a Scrooge."

"Hay gentes en este vuestro mundo- replicó el espíritu- que alardean de conocernos y que llevan a cabo en nuestro nombre actos de pasión, de orgullos, de mala voluntad, de envidia, de intolerancia y de egoismo; gentes que son tan ajenas a nosotros y a nuestros parientes y amigos como si nunca hubieran existido. Recuerda esto, y acúsales a ellos, y no a nosotros, de sus acciones. "