Recordando a El Principito...

Algunos de vosotros ya sabéis que estoy dando clases de castellano como voluntario a inmigrantes y lo gratificante que está siendo para mí (sobre esto hablaré más adelante ampliamente en otra entrada). Pues bien se me ocurrió llevarles a mis alumnos francófonos El Principito, un libro especial. Lo releeré a lo largo de mi vida (si sobrevivo). Aquí dejo mi particular tributo a este libro con mis impresiones de la primera lectura y algunos pasajes.

He de decir que me fascinó la historia, un libro del que no esperaba mucho sinceramente, pero que me sorprendió.

En una historia aparentemente infantil donde el protagonista es un niño y se cuentan sus aventuras durantes sus viajes por el universo hasta llegar a la Tierra, se esconden muchas metaforas y mensajes que hacen reflexionar sobre la conducta de los adultos, y se cuestionan la amistad entre otros valores. Se habla también sobre como el materialismo predomina sobre la esencia y espíritu de las personas. Una obra maestra hermosa llena de pasajes hermosos. Voy a tener que hacer una selección de fragmentos.

Es un libro para releer, porque se descubren muchas cosas. Ideal si uno quiere reflexionar. Ya se encuentra entre mis favoritos.

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"-Si alguién ama a una flor de la que no existe más que un ejemplar entre los millones y millones de estrellas, es bastante para que sea feliz cuando mira a las estrellas. Se dice: Mi flor está allí en alguna parte... Y si el cordero come la flor, para él es como si bruscamente todas las estrellas se apagaran. ¿Y esto no es importante?"

"-Te juzgarás a ti mismo-le respondió el rey-. Es lo más difícil juzgarse a sí mismo que a los demás. Si lográs juzgarte bien a ti mismo eres un verdadero sabio"

"-Tal vez este hombre es absurdo. Sin embargo es menos absurdo que el rey, que el vanidoso, que el hombre de negocios y que el bebedor. Por lo menos su trabajo tiene sentido...Es una ocupación muy hermosa. Es verdaderamente útil porque es hermosa"

"-Adiós -dijo el zorro-. He aquí mi secreto. Es muy simple: no se ve bien sino con el corazón. Lo esencial es invisible a los ojos. "